Es la velocidad con la que conviertes una estrategia en un depósito en tu banco. Hoy más que nunca debes ser veloz y preciso.
Al definir una estrategia nueva, estás tomando acción para mejorar tu empresa. Ahora debes cuidar la siguiente etapa, convertirla en resultados.
Aquí es donde entra la Táctica.
Una meta estratégica: Mejorar 20% el servicio al cliente. Se escucha muy bien, pero no le dice absolutamente nada a la persona que lo ejecutará en el día a día. Porque su trabajo es operar con las herramientas que tiene.
Una meta comercial: Crear un nuevo servicio, para que nuestros clientes permanezcan con nosotros. Es un encargo que no puede cumplir tu mejor vendedor. Justo porque es vendedor, no creador de productos o servicios.
La estrategia es el qué y la táctica es el cómo.
Para que una estrategia se cumpla, tu equipo debe tener muy claro cómo se logrará, es decir, qué pasos tiene que seguir, que cosas hacer y cuáles no, cómo va a reportar el resultado.
Si es un nuevo producto o servicio, debe estar bien definido el mercado meta, los beneficios para el cliente, las características del producto, lo que incluye y lo que no, cómo se cobra, entrega y por supuesto los indicadores.
Opciones para pasar de lo estratégico a lo táctico
Como todo en los negocios, debes considerar la dupla tiempo e inversión, para llegar al mercado y generar ingresos. Normalmente tienes 3 opciones:
- Hacerlo Internamente
- Aprender una metodología
- Comprar una solución llave en mano
1. Hacerlo Internamente
Solo funciona si tú y tu equipo ya tienen experiencia. Recuerda que el equipo con el empezaste la empresa, está en funciones operativas o simplemente ya no está. Entonces no tienes en quién apoyarte, lo tienes que hacer tú directamente. Está opción “barata” toma muchísimo tiempo, porque tú y tu equipo están muy ocupados atendiendo la empresa.
2. Aprender una metodología
Aprender cómo hacerlo es una gran opción, siempre y cuando apliques lo aprendido, de otra manera solo tendrás un bonito diploma. Yo siempre imparto talleres, porque combinan el aprendizaje con la construcción de un entregable de negocio, como un ingreso recurrente. Esta opción requiere inversión de tiempo y dinero. La ventaja es que una metodología bien aprendida puedes aplicarla y enseñarla internamente, para replicarla en otras estrategias
3. Comprar una solución llave en mano
En esta caso, un especialista, subrayo especialista, se encarga de construir la parte táctica a partir de tu estrategia. Requiere interacción contigo para validar y aprobar. La ventaja es que aprovechas toda la experiencia del especialista a tu favor, lo que se traduce en un tiempo menor aunque implica una inversión mayor, vale la pena para llegar a mercado.
Como te comentaba al principio de esta sección debes evaluar el costo / beneficio de las opciones 2 y 3. En base al tiempo que te tomará llegar a mercado y los ingresos nuevos que generarás para tu empresa.
La opción 1 no te la recomiendo, normalmente tarda tanto que la estrategia pierde relevancia o simplemente se deja en un cajón.
El mercado siempre valida las estrategias
Cualquier estrategia hoy en día, necesita la validación del mercado, por ello es fundamental la velocidad táctica, para llegar al cliente y poder hacer los ajustes necesarios con velocidad y precisión, eso te dará una ventaja en el mercado y la estabilidad operativa que necesitas para generar un flujo de efectivo estable, continuo y creciente.
Búscame para platicarte cómo puedo apoyarte a pasar de la estrategia a la táctica, enseñándote una metodología o construyendo el modelo que necesitas. Estoy a tus órdenes, agenda una Sesión Antidesmadre, en esta liga.
Recuerda: Táctica = Actividades = Resultados.