200 mil gracias por la oportunidad de estar en contacto por este medio. Ha sido un viaje espectacular.
Todos los sábados por la mañana escribo el artículo de la semana y de inmediato lo distribuyo a través de mis redes sociales.
Me ha tocado escribir en los lugares más diversos: Casas, oficinas, hoteles, aeropuertos, cafeterías, parques. En diferentes ciudades y por supuesto en todas las épocas del año.
En un sábado normal, primero salgo a tirar la polilla, que solo se me cae corriendo y de regreso escribo el artículo.
Si estoy de viaje, simplemente procuro que sea mi primera actividad en la mañana.
Me siento muy contento de haber generado un hábito, que al mismo tiempo es un vehículo para servir a los demás.
Por supuesto, alguna vez me ha dado flojera, un bloqueo mental o las dos cosas. Es curioso, porque estando en esta situación siempre recibo algún comentario que me inspira a seguir escribiendo.
Todos, todos, tenemos muchas cosas que compartir: Nuestra experiencia, pensamientos, recomendaciones, aprendizajes.
Compartir es una fuente inagotable de beneficios para todos, esta ha sido una de mis principales lecciones durante estos 200 artículos.
Así es que te invito a compartir, hoy en día tenemos los medios para llegar a miles de personas. Puedes escribir, grabar un video o un audio.
Te aseguro que más de una persona, aprenderá de ti algo que necesitaba para hacer un cambio positivo en su vida profesional o personal.
Que tu vida sea tu fuente de inspiración para compartir.
Durante la semana, todos aprendemos muchísimas cosas, solo necesitas una, para hacer una pieza de contenido que ayude a otras personas.
Puede serle útil a tu familia, tus amigos, las personas en tu empresa, gente con intereses similares.
No necesitas ser un experto en el tema, necesitas ser un experto en compartir de corazón, tus experiencias y aprendizajes.
Una sugerencia para tener siempre algo que compartir: Durante la semana, escribo títulos de posibles artículos, que se me ocurren al estar interactuando con otras personas.
Eso es todo lo que tengo, una lista de títulos, en promedio tengo 10, a veces pasa algo muy relevante en la semana y ese se convierte en el título principal.
El sábado cuando estoy corriendo, de repente salen un par de ideas más, porque mi cabecita loca ya sabe que toca escribir.
Me siento a escribir, si ya tengo un tema muy fuerte en mi cabeza, desarrollo ese tema. En caso contrario, recurro a mi lista, selecciono el título que más me guste y empiezo a escribir.
Después de 200 artículos ya he desarrollado una estructura mental, es como andar en bici, no pienso en cómo guardar el equilibro, pienso en el lugar al que quiero llevar a mis lectores.
Lo mismo te pasará cuando empieces a compartir para servir.
Compartir es una de las formas más bonitas de darle gracias a la vida por todo lo que hemos recibido.
Nuevamente quiero darte las gracias por la oportunidad de compartir.
Nos vemos la próxima semana.
Postdata: Se me olvidó poner Desmadre Operativo en el cuerpo del texto.
Te invito a que platiquemos, puedes agendar reunión en esta liga.
Recuerda: Compartir para servir.