Los retrabajos, malos entendidos, falta de claridad, información a medias, problemas de comunicación: Provocan que el Talento esté Lento.
Normalmente responsabilizamos a las personas en nuestra empresa, cuando el verdadero culpable es el Desmadre Operativo.
Esta situación es muy frustrante para las personas de nuestro equipo, porque en lugar de estar aplicando y desarrollando su talento, se la pasan resolviendo urgencias.
Como dueño, es aún más frustrante, porque teniendo un equipo talentoso, las cosas no salen, por alguna extraña razón.
Entonces pasas por muchas etapas:
Etapa regañona. Te la pasas regañando a cualquier presunto implicado, hasta que caes en cuenta de que no sirve de nada.
Etapa entrenadora. Contratas cualquier cantidad de cursos y entrenamientos, para que la gente se “arregle”.
Etapa tecnológica. Compras la tecnología que le funcionó a tu compadre, pero ahora solo tienes un desmadre más rápido.
Etapa contratadora. Intentas resolver los problemas contratando más personas, sin embargo, más personas, más problemas.
Etapa resignada. Así es mi industria y mi empresa, es normal, porque nuestro trabajo es muy dinámico. Trabajamos bien bajo presión.
¿Por qué estas etapas no dan resultados?
Porque solamente se enfocan en las consecuencias, no en la causa raíz.
Cuando en tu empresa, no hay orden, no hay una definición clara de responsabilidades, la comunicación es dispersa o nula, ninguna iniciativa va a durar más de 2 semanas.
Resalto el hecho de que estoy hablando de la empresa, no de las personas.
Es nuestra responsabilidad definir con claridad, en blanco y negro, cómo deben ser las actividades en nuestra empresa, desde que contactamos a un prospecto, hasta que le cobramos.
Una vez realizada esta descripción, debemos explicarle a cada persona en la empresa cuál es su tramo de acción, que cosas le corresponden, cuáles no, qué va a medir, cómo será evaluada.
Talento Ágil
Si en tu empresa hay orden operativo, fomentas el desarrollo del Talento de cada persona.
Con la tranquilidad mental que da el orden, las personas se hacen cada vez mejores, gracias al ejercicio diario de su talento.
Se crea una cultura de trabajo ágil, precisa, que está en constante evolución y anticipa situaciones de riesgo.
Creas un ecosistema que privilegia a todos sus participantes: Clientes, talento, proveedores, dueños.
En este punto, todo agrega valor: El entrenamiento, una nueva tecnología, contratar más talento. Porque cada iniciativa se enfoca a dónde generará más valor.
Cuidar y desarrollar el talento de tu equipo, es tu principal responsabilidad.
El propósito de la Metodología Sin Desmadre Operativo, es proteger la fortaleza principal de tu empresa, para que las personas puedan exponenciar su talento.
En esta liga puedes agendar directamente una llamada en el horario que prefieras. Me dará mucho gusto compartir contigo, cómo puedes convertir tu empresa en un lugar de Talento Ágil.
Recuerda: Claridad = Agilidad.