Son todos los gastos fijos, que se comen la utilidad si no los cuidas.
La mostrocidad se vuelve invisible cuando solamente cuidas el saldo total en las utilidades. Si salen en negro está bien, si salen en rojo hay que vender más.
Al ser invisible va creciendo, alimentada por las utilidades y el desmadre operativo, hasta que llega un punto en que la empresa no puede sostenerse.
Por eso la llamo así, es un monstruo que ha crecido tanto que se convierte en una mostrocidad (lo escribo mal para aumentar el dramatismo).
¿De dónde salió la mostrocidad?
Del descuido en los gastos fijos. No salió de un día para otro, fue naciendo en pequeños gastos de la oficina, con algunos proveedores o en los servicios que ofrecemos.
Si la empresa va bien, aumenta el descuido, porque hay flujo y se puede dar esos lujos.
Por eso es difícil verlos a primera vista, están escondidos en medio de todos los gastos que sí son necesarios.
Están en todos lados, en los servicios de la oficina, en la nómina, en las líneas de crédito, con algunos proveedores, incluso con algunos clientes.
Muchos surgieron hace años por una situación de mercado que ya ni siquiera existe, por un cliente que ya no está o un servicio que ya casi no vendes.
¿Cómo detectarla?
Es una tarea que no puedes delegar, claro te puedes apoyar del área de finanzas o contabilidad para los números generales, pero tú necesitas hacer directamente el análisis, para darte cuenta de la magnitud de la mostrocidad.
Como siempre, te recomiendo recurrir al blanco y negro. Con listas, sumas y restas.
El primer paso es separar tu negocio en sus grandes componentes. Por ejemplo: Servicios y Corporativo.
Identifica todos los gastos que están solamente relacionados con los servicios que ofreces. Necesitas una lista de gastos para cada tipo de servicio. Especificando el nombre, por qué lo necesitas y el monto.
Ahora realiza una lista de todos los gastos corporativos. Aquí vas tú, el equipo de soporte a los servicios, rentas, vehículos, seguros, créditos. Igual, especifica, nombre, por qué lo necesitas y el monto.
En este punto ya habrán saltado muchos gastos innecesarios o que podrían hacerse más eficientes.
Para tener un análisis completo, en la parte de servicios, incluye los ingresos que genera cada servicio, réstale los egresos y tendrás la utilidad que genera cada uno.
Aquí harás otro descubrimiento importante, cuáles servicios son rentables y cuáles te están costando dinero.
Hay servicios que simplemente ya no son rentables, aunque recortes gastos simplemente no dan.
¿Cómo elimino la mostrocidad?
La mostrocidad no se elimina, se controla, porque siempre necesitas gastos fijos corporativos para soportar el funcionamiento de la empresa.
Lo importante es tenerla siempre a la vista, para evitar que crezca por el descuido y el desmadre operativo.
Teniendo en cuenta este punto, puedes completar tu análisis. Ya tienes la lista de gastos fijos corporativos depurados, el total de esos egresos, necesita cubrirse con la utilidad de los servicios.
Es obvio, sí, lo que no es obvio es la combinación de servicios que necesitas.
Como en cada servicio que ofreces ya conoces la utilidad, entonces calcula cuántos servicios necesitas para cubrir la mostrocidad y tener una buena utilidad.
Ejemplo súper simplificado. La mostrocidad te cuesta 10,000 panchólares. El servicio A genera 1,000. Para salir tablas necesitas 10 servicios A, para generar utilidad necesitas 20 servicios.
Si de bote pronto, no sabes qué cantidad y combinación de servicios necesitas para generar utilidad, estás permitiendo que la mostrocidad crezca.
Cuando la mostrocidad está suelta, todo lo que hagas la hará crecer más: Tomar una línea de crédito, vender servicios que te generan ingresos rápidos pero te desvían de tu operación, seguir vendiendo servicios que no te convienen, comprar equipos que no necesitas para un servicio que crees que será bueno.
Tener un presupuesto no es suficiente. Necesitas saber cómo se relacionan los componentes, cuánto necesitas vender para mantener la mostrocidad controlada y tener utilidades saludables.
Aún más importante, tu equipo necesita tener esta claridad, saber qué parte les corresponde cuidar, para mantener un esfuerzo conjunto, cotidiano, que aproveche todo la que ya tienes y genere utilidades.
Teniendo este cuidado, en lugar de nuevos gastos tendrás inversiones, que apoyarán el buen funcionamiento de las piezas productivas de tu empresa.
Si no controlas la mostrocidad, se comerá tus utilidades.
Nuestra plataforma de colaboración Calixe, está diseñada para mantener a la vista la mostrocidad y la rentabilidad de cada servicio, a partir del trabajo diario de cada persona que las atiende.
Te invito a que platiquemos sobre el tamaño de la mostrocidad en tu empresa y cómo controlarla. Agendemos una reunión en esta liga.
Recuerda: Di no a la mostrocidad.